El llanto es un fenómeno normal en la infancia, principalmente durante el primer año de vida. Se estima que el rango normal de llanto en lactantes sanos es aproximadamente de 2-3 horas al día durante los 3 primeros meses. Por regla general, los cuidadores lo interpretan como expresión de una necesidad, por ejemplo hambre, molestias gastrointestinales (“gases”), necesidad de cambio de pañal, dolor…etc y esperan que el bebé se calme cuando cubran sus necesidades. Sin embargo esto no es siempre así y desafortunadamente el llanto no siempre tiene causa clara ni las maniobras que realicemos van a implicar el consuelo del niño. Algunos padres perciben el llanto inconsolable como muestra de una deficiencia en el cuidado de sus hijos y los zarandean como consecuencia de la frustración, impotencia o ira generada ante la incapacidad de comprender ni controlar la situación. El traumatismo craneoencefálico no accidental resultado de la agitación (conocido anteriormente como Síndrome del niño agitado o zarandeado o “shaken baby syndrome” en la literatura sajona) es la causa más común de de muerte traumática en menores de 1 año. Se da con una frecuencia aproximada de 15-25 lactantes por cada 100000, y tiene una importante morbimortalidad,ya que una cuarta parte de los lactantes que lo sufren tienen un desenlace fatal y dos terceras partes presentaran secuelas neurológicas graves que incluyen daño cerebral, retraso mental, epilepsia, ceguera o problemas de aprendizaje que requieren de atención médica especializada, rehabilitación y servicios educativos especiales durante muchos años. A pesar de su gravedad parece que hay una ausencia de concienciación social y diversos trabajos realizados en campañas de prevención reflejan que por cada niño que sufre lesiones graves como resultado del zarandeo, otros 150 niños pueden ser sacudidos sin detección. La persona que con mayor probabilidad agita al niño es el padre o el representante masculino de la pareja. Las sacudidas o el zarandeo son normalmente provocados por la incapacidad del cuidador para calmar el llanto del bebé que típicamente tiene unas características determinadas que han sido englobadas bajo el acrónimo PURPLE: P: Peak pattern (crying peaks around 2 months, then decreases) U: Unpredictable (crying for long periods can come and go for no reason) R: Resistant to soothing (the baby may keep crying for long periods) P: Pain-like look on face L: Long bouts of crying (crying can go on for hours) E: Evening crying (baby cries more in the afternoon and evening) Es decir, el Pico de las crisis de llanto se produce en torno a los 2 meses de vida, con un patrón Impredecible, que aparece y desaparece sin razón aparente, de predominio vespertino o nocturno, con expresión facial de Dolor importante. Es Resistente a todas las maniobras habituales que lo calman y tiene una Duración muy prolongada. Pero ¿Que lleva a un adulto a sacudir al lactante? Debemos replantearnos la actitud ante el llanto de nuestros hijos, considerarlo como una reacción normal, aprender a identificar las posibles causas tratables que lo generan y los signos de alarma que sugieran un problema importante de salud (fiebre alta, vómitos continuos, lesiones en la piel…etc). Si tras valorar al niño no encontramos nada alarmante, debemos mantener la calma e intentar alguna maniobra de consolación que haya funcionado en otras ocasiones, pero nunca agitar al niño ya que las consecuencias pueden ser devastadoras, lesiones cerebrales con elevada morbimortalidad e importantes costos socioeconómicos. Pensamos que es necesaria la creación de programas de educación, concienciación y prevención, que enseñen a los padres los peligros de sacudir a un bebé y el manejo de una forma segura del llanto desconsolado de su hijo. Estos programas establecidos en otros países como EEUU o Australia, realizados por enfermeras de la maternidad de los hospitales o en atención primaria han mostrado que reducen el riesgo de sufrir lesiones cerebrales por trauma no accidental con un coste irrisorio por persona. Por ello, una vez más quiero hacer una campaña de concienciación sobre un tema de vital importancia en la sociedad actual en la que vivimos.
Foto: freedigitalphotos.net (David Castillo Dominici)